No hay fotografías, no hay palabras. Sólo existe lo que se ve. Esta luz, este instante. Lo otro ya no está, no construye: simplemente señala. Cosas que escribimos, cosas que vivimos. Ya no están. Y no hay fotografías que lleven a un futuro. Tampoco nada de él está escrito. Lo que ves es lo que serás, pero no lo sabes, aún no puedes saberlo: por eso preguntas. Unes pasado y palabras que solamente preguntan. Fotografías que sólo son recuerdos, palabras que sólo buscan la raíz, que confirman el tiempo que no olvidarás.